Citation:
Aldina Quintana. 2010. “La &Laquo;Vida Moderna&Raquo; En La Literatura SefardÍ En JudeoespaÑOl (Siglos Xix-Xx)”. In Textos Sin Fronteras. Literatura Y Sociedad, Pp. 385-398. Pamplona: Eunsa, Ediciones Universidad de Navarra.
Abstract:
Lo español y lo judío estaba siempre presente en la lengua y la cultura de los sefardíes, por lo que estas dos constantes tampoco podían faltar en su literatura en judeoespañol, en la que se cultivaron géneros netamente judíos, como toda la literatura rabínica, junto a otros de origen hispano, tales como los tradicionales de transmisión oral y, por último, las coplas, un género de gran personalidad entre los sefardíes, en el que se conjugan ambas herencias. A mediados del siglo XIX se introdujeron otros, a los que se ha denominado «adoptados» por tratarse de géneros importados que entonces estaban de moda en la sociedad europea occidental.Los géneros adoptados comenzaron a cultivarse con un claro afán de imitar a las literaturas occidentales: se escribieron novelas y poesía de autor, y en todas las comunidades surgieron grupos de teatro de aficionados que produjeron algunos textos teatrales para su propio consumo o adaptaron y tradujeron obras de otras literaturas. Tanto en la novela como en el teatro destaca la escasez de textos originales sefardíes.
Por lo general, la atención de los sefardíes se centró en las obras de los prerrománticos, románticos y postrománticos franceses. De los naturalistas y realistas, fue Emilio Zola la única figura que gozó de cierto éxito entre los judeoespañoles, debido a su intervención en el caso Dreyfus. Los grandes autores rusos, como Tolstoi, Dostoievsky o Gorki, también llegaron al conocimiento del público sefardí a través del francés. El interés de los promotores de la cultura sefardí por obras de la literatura universal resultó bastante excepcional, puesto que lo más común fue
que se tradujesen o adaptasen piezas mediocres y simplonas que se podían leer en
los periódicos sefardíes o adquirir independientemente. Cuando un autor sefardí se proponía superar lo meramente popular, el judeoespañol dejaba de ser el código de expresión.
Sin embargo, no se puede negar el importante papel que los géneros adoptados desempeñaron en el seno de la sociedad sefardí hasta constituir un verdadero fenómeno sociológico, precisamente en una época de grandes transformaciones políticas y sociales que se inició a mediados del siglo XIX. Este es el tema del presente artículo, en el que analiza la representación de la vida moderna en la novela y en el teatro en judeoespañol, géneros en los que la mujer y los cambios en los que ésta se vio involucrada, así como sus repercusiones en la sociedad sefardí, ocuparon un lugar prominente.