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The private correspondence between Sephardi Jews flowed in the 16th century. Even belonging to the less elaborated written communication modality, the letters written by Sephardim in the Ottoman Empire presented perfectly defined structural features and determined formulations, comprised of an amalgam of Hispanic and Hebrew influences, whose cultural components ca be identified: They reflect the distinctive Castilian structure of the end of the 15th century, based on the six parts of the Ciceronian oratory, and consisted of five parts: salutatio, sometimes exordium, narratio, petitio and conclusio. A part of the formulations referred to models of Spanish letters of the 15th century, but those of strong Christian connotation were substituted for other taken directly from their own Jewish cultural heritage.
Uno de los rasgos más característicos de las lenguas judías es la variedad en el origen de los elementos que las componen, debido al contacto que los judíos han tenido con otras lenguas a lo largo de su historia. El judeoespañol, que se formó principalmente del castellano hablado en 1492 por los judíos de los reinos de Castilla y Aragón, además de poseer los característicos elementos hebreos y ara-meos, cuenta en su repertorio con formas de origen griego y, especialmente, de origen árabe, con formas procedentes del aragonés, del catalán, del portugués, del italiano y de las lenguas habladas en la península de los Balcanes, así como con formas procedentes del turco y del francés. Aquí nos ocuparemos de algunos de sus elementos iberorrománicos no castellanos –de origen aragonés y portugués-integrados en la coiné sefardí. La lengua romance del Reino de Castilla de finales del siglo XV, en su variante más popular, constituye la base lingüística del judeoespañol de los sefardíes que después de la expulsión de 1492 encontraron refugio en el Imperio Otomano y en el Norte de África. Elementos iberorrománicos no castellanos se encuentran ya presentes en los textos sefardíes del siglo XVI escritos en castellano, especialmente en el subsistema léxico, aunque también en los subsistemas fonológico, morfológico y sintáctico y, en su mayoría, continúan estando presentes en la lengua hablada hasta nuestros días y aparecen también en su literatura en todos los géneros.
La Alborada fue el primer periódico sefardí y el único en judeoespañol que existió en Bosnia. Se publicó durante casi un año (diciembre de 1900 y septiembre de 1901). Antes (entre el verano de 1898 y la primavera de 1899) lo había hecho en Russe (Bulgaria). La Alborada trataba de establecer un puente entre el mundo tradicional sefardí en vías de desaparición y el mundo moderno emergente, postura que desembocó en el sefardismo de Bosnia, como estrategia de preservación de la identidad judía frente a la asimilación. La modernización de la mujer sefardí y su tratamiento en la Alborada de Sarajevo (1901) puestos en relación con el discurso dominante entonces en Europa y con las posturas mantenidas por otras corrientes sefardíes que ya han sido analizadas son los temas que se abordan en este artículo.
Aldina Quintana. 2009. “A Linguistic Analysis Of The Judeo-Spanish Idiolects Recorded By Subak (1908) And Luria (1927)”. In Judeo-Spanish From The Balkans: The Recordings By Julius Subak (1908) And Max A. Luria (1927). (Sound Documents From The Phonogrammarchiv Of The Austrian Academy Of Sciences: The Complete Historical Collections 1899-1950, Series 12/Oeaw Pha Cd 28), Pp. 27–39 & Transcription pp. 40–72. Vienna: Verlag der Österreichischen Akademie der Wissenschaften.
Cuando en 1860 las tropas españolas conquistaron Tetuán se encontraron con hombres y mujeres, mayores y niños, musulmanes o judíos; muchos de ellos conservaban aún nombres o apellidos españoles. Los cronistas, viajeros e historiadores españoles que se ocuparon de la guerra de África mencionan por unanimidad el caluroso recibimiento con que los judíos dieron la bienvenida a los españoles en un castellano que les parecía medieval y la hospitalidad con que acogieron en sus casas a quienes consideraban sus liberadores. Sin embargo, este reencuentro no suscitó el impacto que era de esperar por el descubrimiento de aquellos hispanohablantes y en su tiempo no tuvo más que cierta repercusión oficial en España. El judío imaginario popular seguía todavía vivo, incluso en las mentes de los españoles más liberales. Casi medio siglo después, una vez que la libertad de cultos había sido declarada en 1868 y España había entrado en la llamada Restauración,6 había perdido todo su imperio dando lugar a una crisis de valores muy profunda expresada por los intelectuales de la Generación del 98, las repercusiones de las tres guerras carlistas continuaban y los sectores políticos y militares más conservadores seguían empeñados en la conquista de África, el escritor realista Benito Pérez Galdós utilizó aquella guerra de África en dos de sus "Episodios nacionales": Aita Tettauen y Carlos VI, en la Rápita (ambos 1905) para representar todas las enfermedades que padecía la España de su tiempo. Una parte considerable de las acciones narradas allí se desarrollan en Tetuán, y los sefardíes y el Mellah ocupan un lugar destacado en estas obras. Aquí se estudian la obra "Aita Tettauen" (‘Guerra de Tetuán”, ‘Ojos de Manantiales’), aprovechando la descripción que el autor hace del Mellah tetuaní y de sus habitantes, de sus relaciones con los coterráneos y, muy especialmente, con los españoles que están llegando a Tetuán, ya como aventureros, tipo éste personificado en la figura de Santiuste, ya como conquistadores personalizados en soldados sin nombre, para determinar el sentimiento que el judío despertaba a comienzos del siglo XX entre los grupos más liberales de la sociedad española a los que pertenecieron parte de las figuras públicas que, como Galdós, cuestionaban el papel que se había asignado al judaísmo y al islam en la construcción de la epopeya nacional.
This work includes two Genizah fragments of a Hebrew-Ladino glossary with exceptional characteristics: the unconventional spelling of the Ladino glosses following the Biblical Hebrew orthography with dots, and the reflex of strong phonetic influences of Judeo-Arabic. By means of a philological analysis of the glossary it was possible to obtain some details about data and geographic origin of these fragments, and the frame of its creation. The results of the translation’s analysis allows the classification of the glossary in the group of traditional (en)ladinamientos made by Sefardim in the 16th century in the Ottoman Empire.
We present here four Sephardic texts of the 16th century originating in the Ottoman Empire. Although their authors have an unequal level of instruction, belong to different social layers, reside in different cities of the Ottoman Empire and possibly have distinct ethnic origins, common to the four texts is the Castilian language, which shows the undoubted preponderance of this language among the Jews of the Sephardic communities as early as the middle of the 16th century. Nevertheless, all the texts are characterized by the influence of other languages, especially Portuguese and Turkish, alongside the characteristic Hebrew and Aramaic elements found in every Jewish text written in the vernacular languages. The first three testimonies appear in the collection of responsa of the prominent dayyan of Salonika (Salonika 1595) Rabbi Shemu’el de Medina (1506–1589), in the section Hoshen Mishpat. As we can see here, many communities throughout the Ottoman Empire and beyond consulted Medina on halakhic matters. The last text is a letter found in the Cairo Genizah.
El español fue la principal lengua de los sefardíes que durante cinco siglos residieron dentro de las fronteras actuales de los países de los Balcanes, Turquía, Israel y Egipto. Este volumen trata la variación del judeo-español en este ámbito geográfico. ¿Qué rasgos lingüísticos identifican a un hablante de judeoespañol de Estambul, de Salónica, de Plovdiv, de Pristina, de Sarajevo o de Jerusalén? ¿En qué se diferencia la lengua empleada por hablantes que pertenecen a las capas sociales altas del resto? ¿Cómo varían los registros lingüísticos manejados en un texto periodístico, uno exegético o una carta personal? ¿Qué influencia ejercen la tradición, las transformaciones sociales o el devenir histórico en los cambios lingüísticos y cómo se entrelazan estos cambios entre sí? El resultado de los procesos de coineización, evolución lingüística interna, contacto de lenguas, etc., dan al estudio una marcada orientación histórica. La obra se completa con 93 mapas lingüísticos que representan el núcleo del análisis sincrónico. En ellos se presenta la variación geográfica de los hechos lingüísticos analizados en su estadio entre los años 1850 y 1940, según se deduce del análisis realizado sobre decenas de entrevistas y más de un centenar de textos que abarcan los géneros literarios más dispares.
Fue principalmente en las comunidades de Salónica y de Eslambul donde el español de los sefardíes adquirió nueva personalidad a través del proceso de coineización en el período inicial. En el proceso de convergencia interdialcctal llevado a cabo en las dos comunidades más importantes durante el siglo XVI y parte del XVII, participaron principalmente dialectos hablados en los antiguos reinos de Castilla y Aragón junto con dialectos italianos y portugueses. En estos procesos ha actuado la tendencia denominada "acomodación lingüística" (speech accommodalion) en la psicolíngüística que se caracteriza por la adaptación mutua entre las modalidades dialectales manejadas por los hablantes con finalidad orientada a la integración social de los mismos en una comunidad homogénea y a la eliminación de diferencias grupales indeseables (Giles & Smith 1979.45-65). Como se desprende de los textos del siglo XVI publicados en las dos metrópolis sefardíes, las lenguas en las que los rabinos se expresaron fueron el hebreo, principalmente, y el castellano. En esta contribución se describe la lengua de textos en la lengua vernácula insertos en los responsa rabínicos, generalmente testimonios escritos u orales aportados por los implicados en los conflictos suscitados o por los testigos en los juicios librados en los tribunales rabínicos.
Le "Me'am Lo'ez" offre de nombreux sujets d'étude qui n'ont pas encore été exploités comme, par exemple, le fait d'avoir été rédigé en langue vernaculaire afin de mettre à la disposition du public séfarade un commentaire hebdomadaire à l'intention de ceux qui, au XVUf siècle, n'avaient pas accès aux enseignements du judaIsme, faute de connaître l'hébreu. Du point de vue du style, les auteurs du "Me'am Lo'ez", surtout ceux de la période classique, adoptent un style qui leur est propre. L'un des éléments stylistiques importants est l'usage des formules introductives qui servent surtout à structurer le discours, selon la fonction assignée aux sources qui appartiennent à des genres littéraires très divers. Cet article étudiera les contextes dans lesquels ces formules apparaissent et leur fonction dans l'ensemble textuel. Nous nous proposons également de répondre à une autre question qui touche directement au style éxégétique judéo-espagnol, représenté dans les deux premiers volumes du "Me'am Lo'ez", Bereshit (Gn) (1730) et Shmot (Ex) (1733) qui ont pour auteur le rabbin Ya'aqov Khuli: peut-on attribuer à l'initiateur du "Me'am Lo'ez" la paternité de ce style, ou bien le mérite du rabbin Khuli repose-t-il simplement sur le fait d'avoir mis par écrit un type de sermon qui, bien que prononcé en judée-espagnol, était rédigé en hébreu? Le "Tsena urena" publié cent ans auparavant (1622), en constitue un précédent ashkénaze.
Aldina Quintana. 2006. “Variación Diatópica En Judeoespañol”. Una Lengua En La Diáspora: El Judeoespañol De Oriente, Revista Internacional De Lingüística Iberoamericana (Rili), 8, Pp. 77–98 . Abstract
Siguiendo la definición de Coseriu, el judeoespañol es un dialecto histórico del castellano. Éste ocupa la posición de dialecto secundario, como el andaluz, el canario o las diferentes variedades del español de América (1980: 113). Mientras que la comunidad de hablantes de castellano y de sus otras variedades hace uso de una norma ejemplar, la norma estandarizada del español (= lengua funcional), que a su vez puede ser realizada de manera diferente por los hablantes de los diversos dialectos secundarios, dando lugar a nuevas diferencias diatópicas, dialectos terciarios en la terminología coseriana (1980: 113-1 14), la comunidad de hablantes de judeoespañol no hace uso de esa norma ejemplar que ejerce como elemento unificador entre todos los demás dialectos históricos del castellano. Este factor ha favorecido el desarrollo independiente del español hablado por los sefardíes desde el momento en que fueron obligados a dejar los reinos de Castilla y Aragón en 1492, y ha facilitado su polimorfismo, la característica más sobresaliente del judeoespañol. En la presente investigación se analiza la variación diatópica del judeoespañol según criterios fonéticos y léxicos.
El contacto entre el portugués y el español de los sefardíes que encontraron refugio en el Imperio Otomano después de la expulsión de los reinos de Castilla y Aragón en 1492, se manifiesta ya desde mediados del siglo XVI. Sin embargo, fue durante los siglos XVII y XVIII cuando este contacto fue más intenso. Paradójicamente, en los textos sefardíes del siglo XVIII se aprecia un claro descenso del componente portugués en comparación con los textos del siglo XVI. En esta investigación se analizan algunos aspectos de esta cuestión y los resultados lingüísticos de origen luso del judeoespañol.